Las ciudades de Gómez Palacio y Lerdo forman parte importante de la Toma de Torreón, la primera batalla se llevó a cabo en el Puente Blanco anteriormente ubicado en la J. Agustín Castro de la Ciudad Jardín y que fue protagonizada por los primeros 35 revolucionarios comandados por el lagunero J. Agustin Castro.
" Estos se juntaban el Puerto de las Calabazas que estaba entre el límite de Lerdo y Gómez Palacio, yendo al Huarache. Pero no se juntaban los suficiente y cambiaron de rumbo, para avisarles a los gomezpalatinos, por lo que se cambiaron a las puertas de Santa Rosa de Lima, hoy Gómez Palacio. Ahí es cuando inicia toda la actuación de la Comarca Lagunera en la Revolución Méxicana" narró el historiador José Baltazar Torres Sánchez.
Estos revolucionarios vencieron al 5° regimiento militar , uno de los más importantes que se había posicionado del municipio de Gómez Palacio. Posteriormente el 28 de septiembre de 1913 llegó Francisco Villa a San José de la Goma, ahora conocida como la Goma, Durango.
" Y el día 29 de septiembre, al día siguiente de 1913 se van a la Santísima Trinidad, hoy la Loma, Cuna de la División del Norte y se juntan ahí para definir quién iba hacer el jefe de las fuerza armadas del Ejército Constitucionalista; entre ellos estaba Calixto Contreras y Guillermo Cisneros, el último candidato era Pancho Villa, pero los demás Generales deciden declinar a favor del General Francisco Villa" añadió el cronista
De esta manera el Centauro del Norte se convirtió en el líder de las entonces llamadas "fuerzas rebeldes", marcando la historia revolucionaria con la batalla del Cerro de la Pila y los límites del Río Nazas.
" Donde Francisco Villa está vengando a todos sus compañeros revolucionarios para ir a la toma de Torreón, mientras Felipe Ángeles está dirigiendo el cañonazo, que en aquel tiempo fue cañonazo que fue a dar al Casino de la Laguna. Los revolucionarios tuvieron que derrotar a los federales para poder entrar a Torreón y por ello la Comarca Lagunera es Cuna de la Revolución Mexicana" compartió el profesor Martín Ceniceros.
Momento histórico que a más de 100 años,el tiempo no ha borrado, ya que aún permanece aquel cañonazo, en el ahora Museo Arocena.