El 27 de noviembre de 2014, elementos del Ejército Mexicano ingresaron a las instalaciones de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la Universidad Autónoma de Coahuila (UA de C), en Torreón, en medio de las protestas lideradas por estudiantes de la institución tras la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
La intervención militar
Según Caín Holguín, exvocero de la Coordinadora Estudiantil de La Laguna, el ingreso ocurrió alrededor de las 10:30 de la mañana. "Entró el ejército, aproximadamente 10 o 12 elementos, y se distribuyeron; algunos se fueron a las canchas alrededor de los salones y otro grupo entró a la dirección preguntando por los estudiantes más activos en las movilizaciones".
El entonces director de la Facultad, Pascual Reyes, relató que los militares traían una lista de estudiantes específicos. "Ellos traen una lista de alumnos. Le dije: dime quiénes son, dame la lista, pero no me la quisieron enseñar. Les dije: entonces no puedes estar aquí, estás violando la autonomía universitaria".
La respuesta estudiantil
El ingreso del ejército provocó una reacción inmediata por parte de los estudiantes. Ramiro Martínez, exvocero de la Coordinadora Estudiantil, recuerda: "Se empieza a correr la voz y, de manera espontánea, los estudiantes comienzan a aglomerarse y a gritar al ejército que se retirara".
Al día siguiente, en un hecho inédito en la región, el Ejército pidió disculpas. "Le dijimos que si se quería presentar tenía que ser como civil que ya no iba a entrar nadie armado a la Facultad y sí fue este el señor vestido de civil a disculparse, a decirnos que pues no había dado la indicación de que se que entrar el ejército a la facultad"
Política de represión
Para Caín Holguín, el ingreso del Ejército no fue un error. "No fue casualidad, como argumentaron; tuvieron órdenes de ingresar con listas para buscarnos e intimidar". Añadió que tanto el gobierno estatal como el federal, encabezado por Enrique Peña Nieto, aplicaban políticas claras de intimidación y represión.
Autonomía universitaria
A pesar de la tensión, el evento reafirmó la defensa estudiantil de la autonomía universitaria. Según Rafael Zuno Sandoval, docente y activista, este hecho "significó que los estudiantes verdaderamente hicieran valer lo que siempre han exigido: la autonomía universitaria".
Legado de resistencia
"La resonancia principal fue que se dieron cuenta de que, aunque en Coahuila se lucha a un ritmo diferente, sigue habiendo resistencia", finalizó Ramiro Martínez.
Este episodio se suma a los casos de represión estudiantil en México, dejando un recuerdo amargo, pero también una muestra de la capacidad de organización y lucha del movimiento estudiantil.