El proceso de vacunación contra la COVID-19 continúa en México. La poca disponibilidad de las vacunas ha generado que, las y los ciudadanos, comiencen a impacientarse. Los gobiernos locales, por su parte, dejan toda la responsabilidad a la Federación y, la Federación, señala a la ONU por no hacer nada con respecto a la concentración de vacunas por parte de las grandes potencias.
A pesar de los inconvenientes, hasta el sábado 13 de marzo en Coahuila se han vacunado a 58 mil 789 adultos mayores de 60 años. El municipio que concentra a más personas inmunizadas es Monclova, con 19 mil 421 dosis. Fue precisamente en ese lugar del estado que se vivió la primera crisis hospitalaria producto de la pandemia.
En los municipios grandes como Torreón y Saltillo la vacunación no ha iniciado, sin embargo, en las zonas conurbadas de ambas ciudades ya se contemplaron a algunas poblaciones.
En el caso de La Laguna, se han aplicado 2 mil 650 dosis en Viesca y 3 mil 760 en Francisco I. Madero, mientras que en el sureste se han inyectado a 580 personas en Ramos Arizpe y 3 mil 345 más en Arteaga.
Hasta el momento son tres las vacunas que han llegado a territorio coahuilense: Pfizer, que fue utilizada para inmunizar al personal de salud, AstraZeneca y Sinovac. Ésta última, de origen chino, es precisamente la que ha acelerado el proceso de vacunación en la entidad.
Recientemente algunos gobernadores optaron por regresar las dosis de dicha vacuna porque llegaron hasta 5 grados por encima de la temperatura que marca la norma mexicana, sin embargo, en Coahuila, al analizar el caso y hacer contacto con la empresa fabricante, se optó por utilizarla sólo con un cambio de estrategia; vacunar en zonas cercanas a hospitales y centros médicos para atender cualquier tipo de emergencia que pueda llegar a suceder.