El gobierno de Claudia Sheinbaum estudia un plan para reactivar parcialmente la operación de Altos Hornos de México (AHMSA) en Monclova, luego de que la empresa fue declarada en quiebra el pasado 8 de noviembre por la Jueza Segunda de Distrito de Concursos Mercantiles, Ruth Huerta García.
Fuentes del sector indicaron que una posible medida sería la expropiación o requisa, mecanismos que permitirían al gobierno federal asumir el control de algunas instalaciones.
La reactivación parcial incluiría áreas funcionales como el Molino Steckel y el Horno de Arco Eléctrico, esenciales para la producción de planchón de acero, producto que presenta déficit en el mercado mexicano. Sin embargo, la deuda de AHMSA representa un obstáculo importante.
El conciliador Víctor Manuel Aguilera Gómez retiró la propuesta de reestructura de deuda, y ahora, como síndico de la quiebra, procederá al remate de activos para cubrir el pasivo laboral, estimado entre 50, 250 si se aplica a rajatabla el artículo 123 constitucional y 700 millones de dólares si se respeta el Contrato Colectivo de Trabajo.
En reuniones previas, la Procuradora Fiscal Grisel Galeano y Roberto Lazzeri, del equipo de Hacienda, expusieron a acereros un modelo de subasta diseñado por el banco asesor Rothschild. Julio César Villarreal, de Grupo Villacero, podría considerar participar en la reactivación del molino y horno para recuperar parte de la deuda que AHMSA mantiene con su empresa.