El veterinario Abraham Antelo no dudó en tomar en sus brazos a una víbora pitón de más de dos metros que fue llevada a consulta general. Sin titubear, comenzó a revisarla detenidamente, detectando un problema en sus narinas. Como especialista, procedió a dar las instrucciones médicas necesarias para su tratamiento y mejora.
La atención a animales exóticos como este es algo habitual para Antelo, cuya pasión por estos seres se remonta a su infancia y se ha convertido en su profesión.
"Desde muy chico empecé con mascotas no convencionales: ratas, tarántulas, alacranes, serpientes, peces... llegué a tener de mascota, pero es muy diferente cuando son tus pacientes cuando puede ser medicina en ellos y lo que más me apasiona es hacer cirugía en ellos".
El médico veterinario se especializa en el cuidado de animales no convencionales, tales como conejos, erizos y cuyos, así como en el manejo de la fauna silvestre, como tortugas y otros animales encontrados en su entorno natural. Además, atiende a animales exóticos, aquellos que no son comunes en la región.
Por otro lado, los animales convencionales como perros y gatos también tienen especial atención en la medicina veterinaria.
María Guadalupe es otra apasionada de la vida animal en el consultorio universitario de la Narro, atiende principalmente a casos que canalizan las y los estudiantes, brindándoles orientación y apoyo en cada caso clínico. La veterinaria comparte que en los últimos años han visto un incremento en los casos de cáncer en perros y gatos por lo que exhortó a la población a la detección oportuna.
"La presencia de un aumento de estas patologías puede estar relacionado con el ambiente y principalmente con su alimentación, también se les recomienda siempre al dueño que tengan la corriente sus vacunas, sus desparasitaciones, que tengo una alimentación este de calidad, que esterilicen a sus mascotas todo esto hace que disminuya ese riesgo de presentar algún tipo de cáncer", dijo la veterinaria.
Tanto Antelo como María Guadalupe destacan la medicina preventiva y el compromiso de los propietarios de mascotas para garantizar una vida saludable. Ambos coinciden también en que la profesión requiere pasión, dedicación y un compromiso constante con el bienestar animal, cosa que también comparten.