Para llegar al estado de Durango migrantes denuncian abuso policiaco principalmente por mujeres policías del sur del país, citando que en el estado de Oaxaca y ciudad de México les exigieron 500 pesos por cabeza para continuar con su trayecto.
Los afectados narraron que al no acceder a la petición eran detenidos en módulos, donde eran sujetos a revisiones donde les obligan a quitarse la ropa para revisar todas sus partes del cuerpo y así corroborar que no contaban con efectivo.
"Está una mujer policía con una taza y tienes que poner los 500 pesos y si no, ella te mete la mano, te registran todo porque amenazan, diciendo; si yo te registro y los tienes, te quito todo lo que trae y te devuelvo a la frontera, se han portado muy mal, ¡muy bonitas que son! pero son ¡muy malas, con el migrante!" dijo Luis David Narvaes.