El fenómeno de "nearshoring" o relocalización de cadenas esta atraytendo inversiones históricas a Ciudad Juárez, Chihuahua, donde han crecido en 40 por ciento las propiedades alquiladas por extranjeros, pero aleja el acceso a la vivienda para los obreros locales, cruciales para las fábricas.
LOos constructores se enfocan ahora en este nuevo nicho de extranjeros, dejando de lado a los trabajadores de la ciudad, quienes por los bajos salarios ya no pueden rentar, y menos adquirir una vivienda como en años pasados.
Benjamín Fuentes, uno de los inversionistas de un nuevo proyecto diseñado para extranjeros destaco que "ahorita la mayor parte de la industria se está enfocando en regionalizar y Juárez está muy cerca de Estados Unidos y ya tiene muy aceptada esta cultura de este tipo de industria y por eso todos los proyectos se están viniendo para acá".
El inversor reconoce que las propiedades se encarecen ante la llegada de profesionales asiáticos y estadounidenses por la instalación de nuevas fábricas que antes estaban en Asia.
LOS EFECTOS DEL "NEARSHORING" EN MÉXICO
Un análisis de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacinta) indica que Juárez es la ciudad mexicana que más empleo de "nearshoring" ha capturado desde que inició la pandemia, con alrededor del 18 por ciento del total generado en el país, un estimado de 45 mil plazas laborales industriales.
Gildardo Muñoz Miranda, presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) destaco que "es algo que ha estado sucediendo desde hace dos años y nos está saturando la demanda de la vivienda de renta, viene gente de Filipinas, de China, de Cuba, de Colombia, y han estado llegando y nos ha tocado atender el tema del arrendamiento".
El inmobiliario matiza que los inversores extranjeros "también han estado contratando mano de obra del interior de la república".
"Los extranjeros llegan, rentan, se instalan en sus departamentos y también nos piden que les consigamos vivienda para la gente que están trayendo para construir las maquiladoras".
El arrendamiento de extranjeros que vienen a Ciudad Juárez ha crecido un 40 por ciento, según la AMPI, y ahora el alquiler de una vivienda para entre seis y ocho personas ronda entre los 16 mil pesos (940 dólares) y los 25 mil pesos mensuales (1.470 dólares).
BENEFICIOS DESIGUALES
En este contexto, Thor Salayandía Lara, vicepresidente nacional de Maquiladora y Franjas Fronterizas de la Canacintra lamenta que el "nearshoring" sea un beneficio mayor para los extranjeros que para los nacionales.
"Seguimos siendo un centro de costos, vienen empresas para establecerse aquí, pero no se pueden salir de un rango de costo operativo. Por eso tienen gente que gana muy poco, alrededor de 12 mil pesos (705,8 dólares) ó 15 mil pesos mensuales (882,3 dólares), y por eso no son candidatos a comprar una casa ni de interés social".
El representante de la AMPI confirma que en los últimos años se ha dejado de desarrollar vivienda económica, pues con la pandemia, el costo de los insumos y la escasez de la mano de obra encarecieron la producción de casas.
En tanto Muñoz Miranda reconocer que se "han encarecido el precio de las casas. Una económica cuesta 800 mil pesos (más de 47.000 dólares), lo que hace 4 años costaba 600 mil pesos (casi 35.300 dólares). A los trabajadores no les alcanza para comprar una vivienda, a nosotros nos toca generar y empujar cambios a las políticas públicas de desarrollo de vivienda".
Y advierte que el escenario se prevé aún más complicado porque se estima que en el próximo año se necesitarán 30 mil nuevos obreros.
"Eso nos lleva a pensar en dónde van a vivir esas nuevas personas".