Como terrorismo psicológico calificó la representante de Grupo Vida, Silvia Ortíz, las declaraciones de la titular de la Comisión Especial para la Atención a Víctimas, Mara Gómez Pérez, en el sentido de que el organismo sufriría un recorte del 75 por ciento para atender la pandemia del Covid-19, lo que perjudicaría a las familias que son apoyadas a través de esta Comisión; y que después fue desmentido por el mismo Presidente Andrés Manuel López Obrador.
"Terrible para todas las familias porque hubo familias que hasta vinieron llorando, desesperadas por el comunicado que ella establece. Si ustedes pudieran checar el sueldo de la licenciada Mara, el sueldo de Michael Chamberlin; nada más el de Mara es de más de 200 mil pesos; de ahí se está fugando dinero que no debe de ser."
La activista lagunera, quien representa a familias que como ella, desconocen el paradero de un familiar, consideró que la Comisión tiene gastos excesivos que se pueden reducir para realizar el recorte por motivos de la pandemia o austeridad, sin que represente una afectación para las víctimas de violencia que dependen del apoyo del presupuesto de la Comsión.
"Todos los gobiernos tienen incautados inmuebles, por qué no meter a la CEAV en un inmueble incautado por el Gobierno mismo para no tener la necesidad de pagar una renta y ese dinero que supuestamente iba a ser para renta, que sea para los servicios y se quitan un millón de problemas."
Silvia Ortíz señaló que la salida irrevocable de Mara Gómez de la Comisión Especial para la Atención de Víctimas no sólo obedece a la falta de tacto con el que anunció el recorte al presupuesto de este organismo, sino porque desde que entró no ha presentado un programa de trabajo.