Un grupo de personas armadas invadieron la hacienda en donde se encuentran parte de los viñedos de Casa Madero, en Parras de la Fuente, Coahuila.
A través de un comunicado, los administradores de la vinícola lamentaron que no fueron auxiliados por la policía municipal y exigieron al gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, que tome todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de la hacienda y del propio municipio.
En el pronunciamiento, Casa Madero también sugirió cuál pudo haber sido el motivo por el que se desataron los hechos violentos el pasado miércoles 25 de mayo.
"Recientemente, Casa Madero se unió a la Asociación de Tajos de Aguas de Parras, que integran ejidatarios y empresarios de la región, para encontrar soluciones a la escasez general de agua de uso agrícola y que todos los usuarios legítimos tuvieran acceso a su dotación correspondiente de acuerdo con los volúmenes disponibles", indica el comunicado.
Dentro de las acciones que tomaron las organizaciones agremiadas, están la reforestación, creación de parques lineales y rehabilitación de la infraestructura hídrica, por lo que llamó la atención de los afectados que la invasión se diera justo cuando se empezaron a tomar medidas para resolver el desabasto de agua para uso agrícola.
Hasta el momento, ni el gobernador Miguel Riquelme, así como el presidente municipal de Parras, Fernando Orozco, han respondido a las peticiones de Casa Madero.