En campaña, la petición principal hecha al ahora rector Octavio Pimentel, por parte de la Facultad de Medicina de Torreón, fue la gestión para que la nómina de las y los médicos residentes la absorbiera la Federación o el Estado, con el objetivo de aligerar la carga financiera.
Son casi 10 millones de pesos anuales los que se destinan al pago de quienes están la fase de especialización de su formación académica en los hospitales Infantil y Universitario.
"A mí me tocó ya cuando los residentes eran pagados por la Federación (...) eran médicos que provenían de otras universidades de otros estados de la república", recuerda el doctor Luis del Moral Rosette quien fue Jefe de Enseñanza en la Facultad de Medicina.
Fue durante la administración estatal de Enrique Martínez y Martínez cuando el convenio que se tenía con la Federación terminó, transfiriendo la responsabilidad del pago de residentes a los Hospitales que sale de los recursos que generan.
Actualmente, el Hospital Universitario cuenta con 43 residentes nacionales y 13 extranjeros, quienes están adscritos a especialidades troncales como medicina interna, cirugía general, traumatología y ortopedia, anestesiología, y medicina de urgencias. Por su parte, el Hospital Infantil cuenta con 11 residentes nacionales.
"A nosotros el hecho de que la Federación nos apoyara, como se hace en la mayor parte de los hospitales cubriendo ese gasto, nos representaría la posibilidad de ponernos al corriente con las deudas que tenemos con proveedores (...) y nos permitiría también invertir en equipos e infraestructura para el hospital", dijo Ernesto Martínez, subdirector Médico del Hospital Universitario de Torreón.
La solicitud al rector fue clara. Ahora, dependerá de su gestión lograr que la Federación o el Estado asuma esta responsabilidad, lo que no solo aliviaría la carga financiera de la institución educativa y de salud, sino también permitiría ofrecer servicios a precios más competitivos y ampliar su oferta de salud.