La privatización del agua en México se refiere a las políticas públicas mexicanas que han derivado en la administración del suministro de agua potable o del acceso a los recursos acuíferos por parte de empresas o entidades privadas.
En la capital del estado de Coahuila se aplicó el modelo, desapareciendo el concepto del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado (Simas) para transformarse en "Aguas de Saltillo" bajo la promesa de que mejoraría la accesibilidad de agua para sus habitantes.
"En cuanto a la falta de transparencia se incluye el incumplimiento por parte de la empresa Aguas de Barcelona y su filial Aguas de Saltillo en términos de reponer redes de agua potable y drenaje" explicó Gerardo Hernández, director del periódico Espacio 4.
Desde el 2001 Agua de Barcelona (Abgar), empresa española, adquirió el 49 por ciento de las acciones del Simas por 81.9 millones de pesos. Por lo que desde hace 23 años inició su negocio de acuerdo a lo declarado por el analista.
"Habido señalamientos porque las tarifas han incrementado por encima de los índices inflacionarios y por qué se incrementaron de manera exagerada las contrataciones y reconexiones y cortes de agua".
De acuerdo a la experiencia planteada en la capital de estado si se decide privatizar el servicio en la ciudad de Torreón, probablemente se continuará con el encarecimiento del recurso, se implementan tácticas para realizar cobro en contratos o reconexiones que al final de cuentas repercutirá en los bolsillos de los usuarios quienes ahora sí se verán obligados a pagar para poder gozar de agua potable.