El proyecto "Robótica Educativa" impulsado por Gerardo Alejandro González; consiste en el uso de piezas de Lego o bloques de construcción que les permite a los niños con Trastornos del Espectro Autistas (TEA) desarrollar sus habilidades sensoriales y psicomotriz.
La práctica ha logrado que los niños con esta condición logren socializar, incluso más allá de ello como desarrollarse en el área de tecnológicas, desde manejar diferentes tipos de sistemas que le ayudan a mejorar la concentración, seguir las normas y hasta su inteligencia espacial, compartió la madre de familia, Gabriela Ramírez.
"Al momento de que él tiene que buscar cada una de las piezas poder acomodarlas, esto también le ayuda a lo que es la memoria y la concentración que ha sido para nosotros una gran herramienta de apoyo".