De manera gradual, la sociedad lagunera y los generadores de empleo han ido avanzando en la cultura de inclusión de personas con discapacidad auditiva, afirmó Julieta Jove, maestra del Instituto Lagunero de la Audición y el Lenguaje.
En dicho espacio educativo formal se atienden niños y jóvenes con sordera que cursan sus estudios formales desde preescolar hasta preparatoria, bajo el sistema Montessori.
Cuestionada acerca de los resultados de los jóvenes que egresan de sus aulas en el tema de empleo formal, comentó que se trata de personas que han desarrollado independencia y que, además del lenguaje de señas, han llegado a dominar la lectura labio-facial, la lecto-escritura, la mímica y el uso de la tecnología como el teléfono celular como una herramienta efectiva para comunicarse:
"Ahorita hay empresas interesadas en contratar a personas con esta condición, hay empresas que ya tienen unido a su personal a varios sordos y pues sí hemos visto que hay más apertura, a diferencia de años anteriores".
Así, indicó que Lala ya tiene una buena cantidad de empleados sordos, también la empresa textil GUF, Lajat y John Deere, todas satisfechas con su desempeño, capacidad de concentración y cualidades que les permiten ofrecer buenos resultados.
Pasados apenas un par de días de que se conmemoró el Día Internacional de la Sordera, la maestra refirió que en la región es considerable la cantidad de población con esta discapacidad, pero resaltó en especial la importancia de que se les brinde apoyo, sobre todo en el núcleo familiar:
"Que se les brinde la seguridad en sus capacidades, sobre todo. No ver tanto lo que no tienen sino lo que sí tienen"