Después de la Revolución se incrementó el consumo de electricidad por el crecimiento natural de la población en las ciudades de Torreón y Gómez Palacio, por lo que en la década de los 50,s se presentó una crisis de energía eléctrica.
Fue entonces cuando se puso en marcha la Termoeléctrica de la Laguna, conocida como Franke. Su operación puso fin a la escasez de energía eléctrica. Sin embargo, los avances para la iluminar los hogares y hacer funcionar en aquel entonces los tranvías a través de las plantas generadoras de energía, hoy en día se han convertido en la tercera causa de contaminación ambiental.
"Es la tercera causa de contaminación en la región además de las condiciones de aridez, el cambio de estación ,el polvo que incrementa la incidencia de alergia, producen gases: como dióxido de carbono, monóxido de azufre una Termoeléctricas común del sistema tradicional " señaló Miguel Ángel Garza, investigador ambientalista de la Universidad Juárez de Durango.
Para su funcionamiento era necesario el combustóleo ; combustible líquido que contiene cantidades importantes de cenizas, azufre y nitrógeno.
En la década de los 90,s con la operación de la nueva Termoeléctrica de Guadalupe Victoria, las emisiones provocaron que los campos agrícolas principalmente de tomate, calabaza, zanahoria, betabel, cilantro y perejil que estaban alrededor de ella, se extinguieran, según investigaciones de la revista Nomádica.
"Uno de los temas que nos atrajo en la revista es que el valle de Villa Juárez, Monterreycillo que estaban por ahí, estaban llenos de hortalizas y había historias de que de ahí, se surtía toda la Comarca Lagunera y además se vendían a otras entidades de la República. Sin embargo a partir de la operación de la termoeléctrica los propios campesinos señalaban que en las hojas de los cultivos caía un polvo negro y a partir de ahí empiezan a bajar las cosechas a tal grado que varios productos desaparecieron" Héctor Esparza, director de Nomádica.
A raíz de ello, nacieron los grupos ambientalistas quienes previeron el impacto ambiental que afectaría a la Laguna.
" En los ochentas, cuando se empezó a difundir el proyecto de esta termoeléctrica, ahí fue donde nacieron los grupos ambientalistas, donde rechazaban su construcción por el impacto ambiental que ésta acarrearía" añadió el reportero ambientalista
Sus voces al parecer tuvieron eco, mismas que obligaron a que la Comarca Lagunera fuera parte del programa para mejorar la Calidad del Aire (ProAire).
En 1994, a través de la Procuraduría Federal del Medio Ambiente (PROFEPA), se inscribió al programa nacional de Auditoría ambiental donde se optó por eliminar la combustión fósil para implementar el Ciclo Combinado y así reducir la afectación ambiental.
" El calor que generaba esta combustión movían una turbinas lo que producía el calor y contaminantes atmosféricos. Ahora ya ha cambiado la tecnología, digamos más amigable con el medio ambiente; utilizando el gas natural y se aprovechar el poder calorífico para calentar el agua para mover otras turbinas; a esto se le llama Ciclo Combinado que es lo que ahora se utiliza para la generación de energía eléctrica" explicó el biólogo Miguel Angel Puentes Zamarripa.
A pesar de estos avances tecnológicos las termoeléctricas continúan provocando un impacto negativo a nuestro medio ambiente, provocando el denominado efecto invernadero.
" Es imposible que no contaminen ya que desde el momento de quemar un combustible, incluso en nuestra casa al encender el boiler o la estufa generamos este tipo de gases y el problema aquí es el volumen en que se genera, independiente de la tecnología, es imposible no generar este tipo de gases" aseguró Miguel Ángel Garza, investigador ambientalista de la Universidad Juárez de Durango.
Aproximadamente un 20% de los gases de efecto invernadero que se generan en nuestro país son ocasionados por la generación de electricidad a través de este sistema.
Por lo que la tendencia a nivel mundial es cambiar la forma de generar energía eléctrica según el Acuerdo de París, tratado en el que México se comprometió a que en el 2024 un 35 % de la energía tendrá que provenir de fuentes que sean renovables.