Don Marco Gómez, es un caficultor, originario de Tenejapa, Chiapas, quien ha dedicado toda su vida a la cosecha de este famoso grano. La mitad del mes se dedica a realizar trabajo en el campo y la otra mitad viajando de Tenejapa a Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de Las Casas, San Juan Chamula y Comitán para comercializar su producto.
Sin embargo, la pandemia provocada por el Coronavirus, también ha dejado pérdidas económicas para don Marco y cientos de caficultores, quienes cada año enfrentan problemas de plagas, por lo tanto baja producción y abaratamiento del producto.
Dos veces al mes llega a Tuxtla Gutiérrez, en donde regularmente distribuye ?con ayuda de su esposa e hijo menor- cien kilos de café, sin embargo, debido a la crisis de salud, sus ventas sólo en la ciudad disminuyeron un 30 por ciento.
Red Maya de Organizaciones Orgánicas consideró que debido a los múltiples problemas que enfrentan caficultores en Chiapas, esta actividad podría desaparecer en los próximos años en esta región, si no se buscan soluciones inmediatas, además, de que esta situación está obligando a los productores a abandonar el campo y emigrar.