El cerco instalado en el primer cuadro de la capital chiapaneca para prevenir la dispersión de SARS-COV2, podría vulnerar los derechos humanos de la población refiere el activista defensor de derechos humanos Diego Cadenas Gordillo.
"El libre tránsito es un derecho garantizado en el artículo 11 de nuestra Constitución y está garantizado en diversos tratados, restringir el libre tránsito o en términos específicos sería una violación a los derechos humanos".
Aunque se trata de una medida sanitaria que busca evitar que las personas con síntomas de COVID-19 circulen en las calles propagando este letal virus, se deben de garantizar los derechos consagrados en la Constitución, sin embargo, el centro de Tuxtla Gutiérrez es el foco rojo de contagios en estos momentos de la fase tres de la pandemia por coronavirus.
Al último corte de la Secretaría de Salud, en Tuxtla Gutiérrez se han registrado 587 casos positivos, mientras que en el centro se detectaron 23 personas con síntomas de COVID-19 en las últimas horas, a quienes se les practicó la prueba para detectar si son casos positivos de coronavirus.