"Las perdidas económicas han afectado a los más de 6 mil habitantes del poblado, que depende al 100% de la pesca y el turismo para su subsistencia.
El golfo de Santa Clara, es un pequeño poblado del municipio de San Luis Río Colorado, ubicado en el Noroeste de Sonora, que limita con las costas del Mar de Cortes o el Golfo de California, en la zona del desierto Sonorense y cuenta con una población de 6 mil habitantes en la temporada baja de la pesca, y hasta 8 mil durante las fechas más productivas.
La principal fuente de ingresos de los pobladores, son la pesca y el turismo, sin embargo, ambos sectores se han visto seriamente afectados a raíz de la contingencia del COVID-19 en el Estado de Sonora, que inicio a principios de marzo, cuando se aproximaba la temporada vacacional de "Semana Santa".
PRINCIPALES FUENTES DE INGRESO.
LA PESCA.
EL TURISMO.
8 MIL A 10 MIL HABITANTES EN EL GOLFO DE SANTA CLARA DURANTE TEMPORADA ALTA DE PESCA
Si bien, el turismo, no es la fuente principal de recursos para los habitantes del pequeño poblado, este sector deja una derrama económica de gran importancia para restauranteros, hoteleros y comerciantes locatarios, quienes anualmente reciben en las cálidas playas del golfo a más de 31 mil personas de diferentes partes de México y E.U.
Por ello, el delegado del Golfo Adán Gonzalez , señala que a raíz de la pandemia del COVID-19, se han visto seriamente afectados los residentes y comerciantes del lugar, principal mente los del ramo restaurantero y hotelero, que, en esta temporada vacacional, fueron nulos sus ingresos debido a la contingencia sanitaria.
PRINCIPALES SECTORES AFECTADOS.
PESCADORES.
RESTAURANTES.
HOTELES.
COMERCIOS LOCALES.
VENDEDORES AMBULANTES.
Sin embargo, el funcionario, señala que la actividad pesquera no se ha detenido, ya que esta, si es la principal fuente de ingresos de los pobladores y al año genera alrededor de 5 mil empleos directos para los residentes golfeños.
Pero, el sector pesquero, también ha sufrido serias afectaciones, desde antes de la pandemia, comenta Carlos Tirado, quien es líder de los pescadores en aquel poblado, y señala que ya se comienzan a sentir los estragos de la pandemia y de las prohibiciones del gobierno federal, para quienes se dedican a las artes de pesca.
El pescador, subraya que la combinación entre el turismo y la pesca, son el motor principal de los residentes del golfo, quienes ya están resintiendo las afectaciones económicas, por la falta de turismo, tanto en el comercio local, como en el restaurantero que es el principal consumidor de los productos del mar.
ALREDEDOR DE 5 MIL FAMILIAS, DEPENDEN DE LA PESCA.
Esto, ha bajado el nivel de la producción pesquera, y también su comercialización por la falta de demanda que existe durante esta contingencia, principalmente en los países asiáticos que son sus clientes potenciales, lo que afecta directamente a más de 5 mil familias que dependen de las embarcaciones pesqueras, en las costas del Mar de Cortes.
500 EMBARCACIONES AFECTADAS
PRINCIPALES PESQUERÍAS
CHANO.
SIERRA
CURVINA
CAMARÓN
MEDUSA O "AGUA MALA"
Además, menciona que el mercado nacional, también se encuentra afectado por las cuestiones sanitarias, que han obligado a que miles de restaurantes y demás establecimientos que demandan los productos pesqueros, cierren sus puertas durante la contingencia del COVID-19.
Sin embargo, Carlos Tirado, vislumbra una luz de esperanza en la pesquería del "agua mala" o medusa bola que también deja una derrama económica importante entre los pescadores, ya que esta es su última temporada del año en la que se podrían recuperar económicamente, puesto que, en los meses del verano, las artes pesqueras son detenidas por las altas temperaturas que se registran anualmente en el desierto de Sonora.
Por ello, el panorama sigue siendo incierto para los pescadores del Golfo de Santa Clara, ya que de no lograr colocar en el mercado la pesquería de la medusa, perderán por completo la temporada del primer semestre del año, quedando como última alternativa la pesca del camarón, sin embargo, dependen de las disposiciones del Gobierno Federal, que aún no ha podido destrabar las vedas pesqueras que existen en el Alto Golfo de California y que continua afectando a las miles de familias sanluisinas que dependen de la pesca y el turismo en el tranquilas aguas del Golfo de Santa Clara.