Con un enfoque previsor y por instrucción del Comité Estatal de Seguridad en Salud, que es presidido por el gobernador Carlos Mendoza Davis, la Comisión contra Riesgos Sanitarios de Baja California Sur elaboró una cédula de autoevaluación sanitaria que las empresas deberán seguir una vez que la Entidad tenga condiciones adecuadas para incorporarse a la nueva normalidad.
Este documento contempla los aspectos básicos que deberán cumplir los establecimientos para prevenir la transmisión del COVID-19 entre personal y usuarios, comentó la comisionada estatal, Blanca Pulido Medrano al señalar que su aplicación iniciará cuando el Comité Estatal de Seguridad en Salud determiné que puede iniciarse la reactivación de actividades no esenciales.
Esta cédula plantea la necesidad de que las empresas establezcan filtros sanitarios para personal, usuarios y proveedores, así como la reducción de aforos en espacios de uso común. Garantizar insumos para la higiene de manos y desinfección de superficies, colocar señalización para el respeto de la sana distancia, la realización de capacitaciones continuas sobre medidas preventivas, entre otros aspectos de relevancia para reducir riesgos de transmisión de infecciones respiratorias, puntualizó.