Del total de indígenas presos dentro de los Centros de Reinserción Social para Sentenciados en el estado (hablantes de alguna lengua originaria), sólo al 30 por ciento de ellos se les proporciona una traductor, es decir, el 70 por ciento de ellos, no cuentan con alguna persona que les explique cuál es el procedimiento o de qué lo están acusando.
Lo anterior origina que los sentenciados no sepan en realidad cuál es la situación y con ello, los procesos resulten plagados de anomalías, sin ellos, poder defenderse, así lo denunció, la coordinación del área de incidencia del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas.