En los dos últimos años, el tráfico de especies de flora y fauna ha aumentado en la capital chiapaneca, hecho que se comprueba en los decomisos que han aumentado por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa), ante esto, especialistas alertan del avance de este fenómeno que deja grandes cantidades de dinero a quienes se dedican a esta actividad ilícita; lo más alarmante, informó la Profepa, es que el 95 por ciento de las especies comercializadas de forma en esta condición, fallecen, debido a las condiciones en que son transportados para no ser detectados por las autoridades de seguridad.