Catedráticos aseguran que alumnos deben cumplir tanto en aulas físicas como en clases virtuales, con la disciplina, respetar el reglamento escolar, que define entre otras cosas el uso de uniforme, cumplimiento de horario, normas éticas y las relaciones maestro-alumno.
La nueva normalidad, por el COVID-19 impone nuevas formas de convivencia, los llamados de atención para imponer disciplina en clase con un borradorazo o la jalada de pelo, quedaron en el pasado.
Sin embargo, los maestros también deben cumplir con ciertas responsabilidades para evitar sucesos como el ocurrido en la universidad Juárez, en Durango, donde cesaron a una maestra por reprender a un alumno en línea.
"O arreglan sus problemas de cámara o conmigo van a seguir teniendo falta y a la tercera falta yo los doy de baja en mi materia."
Para evitar situaciones similares, profesores deben establecer un normativo de comportamiento y de utilización de estas plataformas virtuales, donde contemple cuales son las actividades que pueden o no pueden realizar los alumnos, profesores y padres de familia durante las clases virtuales.
"Nada más digo que me apaguen el micrófono y que mantengan su cámara y mi micrófono siempre esta dispuesto en el momento en que yo estoy explicando, terminó de explicar y antes de que ellos abran de que comenten, doy las indicaciones para que no tengamos eso, de que yo maestra y el grito, no, no todo explicado todo con educación."
Es necesario que los catedráticos planifiquen con antelación como lo hacen en las aulas físicas, sus clases virtuales, cinco minutos antes de iniciar verificar la conexión de internet y que todos los estudiantes estén conectados.
Entre otras cosas se recomienda que las clases no sean mayores a los 40 minutos, porque la mayoría de los estudiantes tienden a distraerse en casa sobre todo los de niveles básicos, primaria, secundaria y preparatoria.