Un creciente malestar ha invadido a las amas de casa en Chiapas debido al drástico incremento en el precio del limón. Este producto, esencial en la cocina mexicana, se ha disparado a 38 o incluso 40 pesos por kilo, en comparación con los 20 pesos por kilo que se registraban en el año 2020. Este aumento ha dejado a muchas familias preocupadas por su capacidad para acceder a productos básicos.
La escalada de precios se deriva de una serie de factores, entre los que se destaca la escasez de productos que llegan a la ciudad, lo que a su vez se vincula con los numerosos bloqueos carreteros en el estado de Chiapas. Estos bloqueos han obstaculizado el flujo de mercancía desde las áreas de producción hacia los mercados locales, lo que ha provocado una disminución en la oferta de limones y, como resultado, el encarecimiento del producto.
Los productores de limón en diferentes municipios de la zona de los Altos de Chiapas también han alzado su voz, afirmando que no pueden movilizar eficazmente su mercancía debido a los bloqueos y a las dificultades para transportar sus productos a los centros de distribución y venta, además de que en estas fechas próximas a fin de año este suele incrementar su precio hasta un 250% con respecto a su precio durante todo el año.
Esta situación representa un desafío para las familias chiapanecas, que encuentran en el limón un ingrediente fundamental en su dieta diaria.