En el trasfondo de la intensa contienda presidencial, los preparativos para las elecciones municipales en Coahuila han quedado en la sombra, eclipsados por la atención nacional centrada en la sucesión del ejecutivo. Mientras el país se debate en torno a la seguridad y la libertad electoral, los ciudadanos de la región norteña se enfrentan a la crucial tarea de renovar sus ayuntamientos.
Rodrigo Paredes, Consejero Presidente del Instituto Electoral de Coahuila, destacó la importancia de este proceso, recordando que "el día primero de enero del 2024 dimos inicio a este proceso electoral en el que tenemos que renovar 38 ayuntamientos que conforman al estado de Coahuila". Más allá de la esfera nacional, los municipios representan el contacto más cercano de los ciudadanos con la administración pública, siendo responsables de servicios esenciales y recaudación de impuestos.
El próximo 2 de junio, en Coahuila se disputarán no solo las posiciones políticas municipales, sino también la atención de una ciudadanía dividida entre las elecciones locales y nacionales. Con 38 ayuntamientos, 38 sindicaturas de mayoría, 38 sindicaturas de minoría y 408 regidurías en juego, las urnas estarán cargadas de decisiones cruciales para el futuro de la región.
Según Paredes, en esa fecha "la ciudadanía va a acudir el 2 de junio a votar y va a encontrar una urna y una boleta para la elección de presidente de la república, una urna y una boleta para la elección de senadores, una urna y una boleta para las diputaciones federales y una urna y una boleta para la elección de Ayuntamientos". Es un panorama electoral complejo, donde los votantes se enfrentarán a múltiples opciones y responsabilidades.
El Calendario Electoral local marca el registro de candidaturas hasta el 25 de marzo de 2024, dando inicio a las campañas políticas el 31 de marzo y culminando 72 horas antes de la elección, el 29 de mayo. Con estos plazos en mente, los partidos políticos y candidatos se preparan para una competencia que se desarrollará en paralelo a la intensa disputa nacional por el poder ejecutivo.
En medio de la vorágine política que envuelve al país, Coahuila se prepara para una jornada electoral crucial, donde las decisiones locales se entrelazan con el destino nacional, en un reflejo fiel de la complejidad democrática mexicana.