Usuarios de servicios financieros, víctimas de cargo de gastos no realizados y del robó del dinero de sus cuentas bancarias.
Este fraude financiero, de acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), es la acción que una persona realiza para obtener un beneficio propio a costa de dañar la economía de otra.
Este tipo de delitos está al alza, más cuando ahora una parte de las transacciones se realizan vía electrónica, es decir, desde Internet o teléfono celular.
Los más grave es que los bancos no quieren hacerse responsables, del fraude de que ha sido víctimas sus cuentahabientes, explica Francisco Poblano, del despacho de consultores en Protección Patrimonial AP.
"les están sustrayendo los ahorros de su vida son cantidades que oscilan entre los 8 mil lo que encuentren sacan 50 mil en cuestión de minutos se roban 300 mil, 250 mil y está problemática se está dando en todo el país."
Está estafa a través de las redes sociales va al alza.
El robo de información les resulta útil a los hackers y existen varias formas de hacerlo.
"A veces se venden las bases de datos este 50 mil clientes de un banco en la dipweb o incluso en Facebook, ahorita ya estamos preparando varias denuncias penales, donde le estamos pidiendo a las agencias investigadoras que se pongan a revisar esa información porque desde ahí se está haciendo mucho tráfico de información privilegiada."
La compra-venta de bienes y servicios a través de Internet, cuyas transacciones se pagan con tarjetas de débito y crédito, son herramientas preferidas para los hackers por lo que debe ponerse mucha atención al momento de llevar a cabo las compras, pues no existe contacto directo con el vendedor y puede convertirse en fraude.
Las modalidades más recurrentes son: la sustracción de datos personales, contraseñas, nombres de usuario o números de tarjetas de crédito que pueden prestarse al robo de identidad.