Diariamente acuden decenas de personas en condición de calle, enfermos alcohólicos, con problemas de drogadicción e incluso migrantes a la iglesia San Jacinto, misma que se encuentra ubicada sobre la quinta norte oriente, en donde se les brinda alimentación sin costo alguno.
Los responsables de realizar esta labor, indicaron que desde hace cinco años se ayuda a estos grupos vulnerables, sin embargo, el apoyo de la ciudadanía es indispensable, ya que es necesaria la donación de productos y alimentos para brindar este servicio.