En los últimos años, la industria cervecera ha amasado la oferta de nuevos productos con diversos colores y olores, incluyendo una gama de marcas con bajo o nulo contenido alcohólico, como las bebidas "light", "cero alcohol" o "sin alcohol".
Sin embargo, el último Estudio de Calidad de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) advierte que muchas de estas bebidas están mal denominadas como "cervezas", ya que no cumplen con el porcentaje de alcohol necesario para ser consideradas como tales y aunque este aspecto no impacta a la salud de los consumidores, sí representa una falta para las empresas, debido a que no venden lo que ofrecen.
Profeco señala que, una cerveza genuina debe tener un contenido alcohólico que oscila entre el 2 por ciento y el 20 por ciento de alcohol por volumen. Los productos que contienen menos de un 2 por ciento de alcohol, precisa no pueden utilizar legalmente el término "cerveza" y deben clasificarse como "bebidas no alcohólicas". A pesar de esto, muchos productos en el mercado son etiquetados de forma confusa como "cervezas sin alcohol".