Grupos pertenecientes a la comunidad LGBTTI, aseguran que ante la exclusión social que sufren y falta de oportunidades laborales, en muchas casos se ven obligados a realizar prácticas poco seguras para su salud y con ello, a contraer fácilmente enfermedades de transmisión sexual.
Asimismo, denunciaron la falta de capacitación por parte de la mayoría de servidores públicos de instituciones de salud, quienes vulneran los derechos de personas con preferencias sexuales diferentes.
"Cuando tenemos oficios de mayor riesgo, también aumenta la posibilidad de adquirir alguna infección y eso es lo de menos, afecta más esta parte de la discriminación y que seamos víctimas de odio, golpes, muchas veces por una comunidad homofóbico o transfóbica".