Con todas las medidas de seguridad retornaron más desplazados a la cabecera municipal de Pantelhó, quienes permanecían refugiados con familiares en la ciudad de San Cristóbal de Las Casas y San Juan Cancuc; mientras los 21 retenidos aún permanecen privados de la libertad en una comunidad. Esto se dio con el acompañamiento de autoridades estatales, federales, observadores de derechos humanos y un representante de la Diócesis de San Cristóbal. Se retiraron los siete retenes que civiles instalaron en las inmediaciones de la cabecera municipal de Pantelhó, restaurando el acceso al municipio. También inició la etapa de reconstrucción del tejido social, la seguridad y la paz.