Los intentos por recuperar espacios para la población tuxtleca y brindarles un lugar de esparcimiento en el Barrio San Roque -el más antiguo de la capital- no cesan y es la misma sociedad civil quien se ha encargado de darle vida a este lugar de la capital chiapaneca y con ayuda de artistas visuales han realizado 11 murales y han pintado señalamientos viales que benefician a la población en general tanto a peatones como a automovilistas.
La importancia de rescatar estos espacios -de acuerdo a promotores culturales-, es sembrar en la población su arraigo por el lugar donde vive y con ello, disminuir los índices de delincuencia, tema que ha sido constante en este lugar de la ciudad.