San Cristóbal de Las Casas enfrenta una transformación urbana acelerada e impulsada por la gentrificación en su centro histórico. Fenómeno que ha expulsado a residentes de bajos ingresos a la periferia y expandido la mancha urbana en 581.33 hectáreas entre 2010 y 2024, según datos de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
La iniciativa piloto del Programa Municipal de Desarrollo Urbano que elaboró la Sedatu, vincula este crecimiento periférico al alza de precios de suelo en el centro, donde el turismo y la llegada de nuevos residentes han convertido las vivencias en comercios, hoteles y espacios para expatriados.
Esto ha obligado a familias locales a migrar a zonas con menor valor inmobiliario, carentes de servicios básicos y expuestas a riesgos ambientales.
El desarrollo se concentró al poniente (Huitepec, Las Nubes), norte (San Juan del Bosque) y oriente (Santa Cruz), siguiendo ejes viales como el Periférico Norte. En áreas rurales, localidades como Corazón de María y Canaán que registraron el mayor crecimiento.
La expansión hacia la periferia ha generado asentamientos en zonas sin planeación, incrementando la vulnerabilidad a inundaciones y deslaves. Además, la falta de transporte público y servicios en estas áreas profundiza la desigualdad.
El informe destaca la urgencia de políticas para contener la expansión desordenada: con mayor rehabilitación urbana en áreas subutilizadas en el centro para frenar la especulación.
También una densificación, es decir, incentivar edificaciones en zonas consolidadas mediante subsidios o exenciones fiscales. Y generando un nuevo polo de desarrollo alternativo, en este caso, impulsar la localidad rural Corazón de María, al poniente, como complemento urbano.
Todo esto, sin dejar de lado la protección ambiental, limitar el crecimiento en áreas naturales al sur y crear corredores verdes.