Las altas temperaturas no sólo afectan a los seres humanos, también a las mascotas, quienes pueden sufrir de igual manera un golpe de calor que incluso pongan en riesgo su vida.
Para prevenir alguna complicación, se recomienda observar a la mascota y estar pendiente de él durante las temperaturas más extremas.
Los síntomas de alerta pueden ser que el animal esté confuso, tenga ansiedad y muestre aturdimiento.
Asimismo, si su saliva es excesiva, si tiene fuertes jadeos y gemidos o encías muy rojas.
Y es que, si la mascota está sufriendo un golpe de calor tendrá la piel caliente al tacto o incluso puede presentar convulsiones, aumento del ritmo cardíaco, diarrea o le cuesta levantarse.
Ante ello, lo primera que se debe hacer es conseguir que su temperatura baje, Puedes refrescarlo con agua usando paños húmedos. Asimismo, abanicarlo o colocarlo cerca de un ventilador. Ofrecerle cubitos de hielo para que los chupe y mantenerlo hidratado ofreciéndole agua constantemente. Y lo más importante, llevarlo con un especialista para verificar que su organismo se encuentre bien.