En el marco del Día del Trabajo que se conmemoró este 1 de mayo, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) ofreció un panorama sobre el comportamiento de la desocupación, la informalidad laboral y la subocupación para la población de 15 a 29 años, en el contexto de la pandemia.
Dentro de los datos más relevantes, el organismo público destaca que hasta el segundo trimestre de 2022, la tasa de desocupación en la población de 15 a 29 años fue de 5.6 por cada 100 personas económicamente activas
En cuanto a la tasa de desocupación según sexo, expone que durante la pandemia se observaron mayores cambios para los hombres, ya que para ellos, en 2019, la tasa de desocupación era de 5.7 por cada 100 económicamente activos, pero para el 2020 alcanzó su máximo en 9.7 y para 2022, disminuyó a 5.4; y en el caso de las mujeres, en 2019, fue de 6.9, aunque en 2020 aumentó a 7.5 y en 2022 disminuyó a 6 por cada 100 económicamente activas.
Con respecto a la informalidad, el Inegi indica que hasta el segundo trimestre de 2019, la tasa de informalidad laboral de la población ocupada de 15 a 29 años se ubicó en 59.4 por cada 100 personas económicamente activas; en 2020 ?en los inicios de la pandemia por la COVID-19 este indicador disminuyó a 51.3, para el 2021, ante el aumento de la población ocupada, la tasa de informalidad creció a 61, pero para el 2022, disminuyó a 59.5 por cada 100 personas ocupadas.
Al considerar el rango de edad seleccionado según sexo, añade que la tasa de informalidad laboral disminuyó, tanto para hombres como para mujeres, durante el primer año de la pandemia por la COVID-19, ya que, al desagregar la información, por cada 100 hombres ocupados, la tasa pasó de 60.8 en 2019 a 51.7 en 2020, que en el caso de las mujeres, pasó de 57.2 a 50.5 por cada 100.
Y en cuanto a la subocupación laboral que se refiere a las personas que tienen un empleo, pero trabajan menos horas de las que quieren o necesita, puntualiza que en el caso de la población ocupada de 15 a 29 años, la tasa de subocupación en 2020 fue de 21.8 por cada 100: 15 puntos más que en 2019 (6.8), pero al desagregar la información según sexo, el Inegi resalta que en 2020, la tasa en hombres fue de 23.3; en mujeres, de 19.2 por cada 100, lo que significa que quedó por encima del 7.2 en hombres y del 6.1 en mujeres, en 2019.
Aunque, destacó que en años posteriores, la tasa disminuyó: en 2021 fue de 11.7 por cada 100: 11.6 en hombres y 11.9 en mujeres; y en 2022 esta fue de 7.6 por cada 100: 7.8 en hombres y 7.3 en mujeres