Para que las almas de los muertos no vaguen sin rumbo y cometan maldades o travesuras, los ritos funerarios son fundamentales.
El primordial es el altar de muertos, y hoy es el día en el que las almitas bajan al mundo terrenal para despacharse del banquete.
Incluso algunas familias se dan a la tarea de devolver un poco de lo que han recibido por su trabajo a los niños quienes hoy también salen a pedir la tradicional calabacita.
Luis Sebastian Cordero, se prepara todos los años en estas fechas con su luz y sonido de enigma para entregar junto a la familia dulces y algunos regalos a los niños.
"De compartir un poquito compartir un poco de lo que Dios nos da del trabajo, entonces en base a eso pudimos invertir un poquito en dulces en regalos para los niños."