La Medicina Deportiva tiene raíces muy antiguas que se pueden identificar en la medicina China y de la India. Se difunde mayormente desde la época de los griegos.
En tiempos modernos, no fue hasta los Juegos Olímpicos de invierno de 1928, que un comité especial decidió realizar el primer congreso internacional de Medicina del Deporte, esto es publicado por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Por otro lado, la Federación Mexicana de Medicina del Deporte señala que fue hasta mediados del siglo XX que la disciplina surge a partir de la necesidad generada por la práctica empírica dirigida a brindar un servicio médico, fundamentalmente de tipo asistencial, curativo de las lesiones derivadas de la práctica de la actividad física y deportiva.
También señala que previo a la celebración de los Juegos Olímpicos de la Ciudad de México en 1968, se iniciaron estudios de investigación científica. Por ejemplo, en 1962 la XV Asamblea Nacional de Cirujanos, contó por primera vez con una Sección de Medicina del Deporte.
Y en 1965 fue presentada la primera Tesis Recepcional sobre Medicina del Deporte titulada "Medicina del Deporte. Altura y Alimentación. Su Importancia en el Deporte" del Dr. Fileno Piñera Limas de la Escuela superior de Medicina del Instituto Politécnico Nacional.