La pandemia sacudió el mercado laboral y, con ello, la vida de millones de personas trabajadoras.
José Luis, a sus 39 años de edad e ingeniero en electrónica incursionaba en la industria del petróleo como supervisor de intervenciones a pozos sin equipo, pero la pandemia provocó un recorte de personal.
"Estuve en el Instituto Mexicano del Petróleo, en Aspid, estuve en muchas empresas que le prestaban servicio a Pemex, por motivos de la pandemia y por recortes presupuestales del gobierno hacía el Petróleo pues hubo una caída muy drástica en el consumo del insumo y por tales motivos bajo mucho la producción el trabajo también se vino abajo".
Junto a su esposa y dos hijos, volvieron a su tierra natal, en donde la herrería oficio que desarrollo desde muy pequeño es lo que hoy le ha permitido enfrentar la crisis.
"Nunca pensé que se llegará a convertir como parte de mi empleo actual, es una forma de sobrevivir, una forma de trabajar de emplearme para yo poder sacar adelante a mi familia."
Desde portones, cortinas para negocios, ventanas, puertas, hasta la herrería artística con la elaboración de bases para veladoras, sillas o maceteros, son entre otros los trabajos que desarrolla.
"Los trabajos ennoblece no hay como trabajar y salir adelante y sobre todo no robar y no perjudicar a otras personas y llevar un plato de comida a la casa."
La crisis no ha sido motivo para tirar la toalla, sino todo lo contrario, tiene una actitud positiva que inculca a sus hijos.
"Realmente si me levanto y hago lo que me gusta lo que me gusta como un plan "B" porque no tengo ahorita que es lo del petróleo, pero bueno también el petróleo va a llegar un momento que va a volver a crecer eso es una racha nada más que deja la pandemia y de ahí vuelve otra vez a subir, no hay mal que dure cien años."
Cabe hacer mención que de los 2.3 millones de desempleados reportados por el Inegi, 53 por ciento tiene licenciatura o preparatoria.