De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Contra las Adicciones de la Secretaría de Salud federal, seis de cada 10 espacios disponibles en los centros de rehabilitación reconocidos, tanto públicos como privados, en el país, están ocupados por pacientes que buscaban dejar alguna droga.
En Chiapas, algunas de estas clínicas buscan apoyar a este sector vulnerable de la población, es el caso del centro "Guerreros de Dios", que en San Cristóbal de Las Casas da ayuda a quienes lo necesitan.
"El tema de las adicciones es algo que genera sufrimiento, es algo que genera tristeza, amargura, que trae malas experiencias".
Ahí a través de diferentes actividades, como lectura, platicas motivacionales o las mismas actividades que requiere el centro, como aseo o la preparación de alimentos, se busca cambiar al interno.
"Algunas por voluntad propia, algunas por petición de los familiares es un proceso de tres meses, donde se trabaja prácticamente tres parte, es el espíritu, el cuerpo y la mente".
"Todos tenemos una responsabilidad en cocina, más que nada la disciplina, todo eso, la higiene, preparar bien la comida, los alimentos para los compañeros".
La mayoría de quienes están en este centro, están por problemas de alcoholismo y drogadicción, algo, a lo que es fácil acceder.
"Porque ahorita lo que se está consumiendo mucho es el tema del cristal que es una droga bastante barata, vas y consigues esa droga por 30, 40 pesos y el viaje te dura dos tres días"
Lo que buscan es cambiar el chip de la persona con adicción, prepararlo para que, al salir, se enfrente a la sociedad, la cual lo ve negativamente.
"Más la responsabilidad que nos enseñan aquí y tener la higiene más que nada, porque a veces no lo inculcamos en casa, pero aquí nos enseñan a practicarlo para salir con otra mentalidad"
"Al salir, no es que la sociedad te tenga una aceptación, pues ya quedaste como marcado, es un proceso donde la sociedad empieza a ver tu transformación, tu empeño en querer ser diferente"
Aunque tener fuerza de voluntad no será sinónimo de superar una adicción, tener una buena actitud y ganas de abandonar este hábito tan tóxico y empezar una nueva vida contribuirán a conseguir el objetivo final, que es no consumir.