La algarabía que caracteriza a los mercados de Chiapas poco a poco se apaga y es que locatarios no han podido recuperarse de la crisis económica que acrecentó por la pandemia del COVID-19, aunado a problemas sociales que no han logrado ser resueltos por autoridades municipales.
Por una parte, se encuentran los mercados que no son administrados por el Ayuntamiento, como lo es el mercado de los Ancianos, en el cual locatarios están apostando a la promoción y han conseguido un aumento en sus ventas.
Pero por otra parte, se encuentran los mercados públicos ubicados en el centro de Tuxtla Gutiérrez, quienes además de afrontar la crisis económica, deben competir contra vendedores ambulantes, quienes incrementan cada vez más en las calles aledañas.
En estos mercados cerca del 30 por ciento de sus locales se encuentran cerrados, pues nunca pudieron recuperarse de la crisis que comenzó a agravarse en el 2020.