A sus 19 años de edad, Yoneida dio a luz a trillizos en el Hospital General de Zona (HGZ) No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chiapas, y gracias a un equipo multidisciplinario la joven madre y los tres recién nacidos varones están estables y gozan de buen estado de salud.
Asistidos por la especialista en ginecología y obstetricia, Tanya Hernández Montiel, los tres niños nacieron por cesárea en la semana 36, con un peso por encima de los dos kilos; dos de ellos solo requirieron los cuidados básicos para mantenerse estables, en tanto que uno fue ingresado a cunero patológico al presentar moderada dificultad respiratoria; sin embargo, actualmente los trillizos cuentan con buena salud, por lo que fueron dados de alta y están en franco crecimiento.
Los trillizos se suman a una familia que ya contaba con una niña de cinco años, por lo que ahora la familia conformada por Yoneida y Alan estará conformada por seis integrantes.
A pesar de que la paciente no es derechohabiente del Instituto recibió la atención médica en el HGZ No. 1, a través del Acuerdo 126 que estipula que las situaciones de emergencia en zonas rurales podrán atenderse en hospitales urbanos debido a la baja accesibilidad que dichas áreas tienen en torno a servicios de salud de alta especialidad.
La madre fue referida del Hospital Rural del Programa IMSS-BIENESTAR en Mapastepec y por presentar ruptura prematura de membrana, pero aseguró que ya en proceso quirúrgico no tuvo ninguna complicación.
"No hubo ninguna complicación, tuvimos mucho apoyo y fue un trabajo multidisciplinario de anestesiólogos, enfermeras, pediatras que nos ayudaron a recibir a los bebés en terapia intensiva neonatal para su manejo integral y para vigilancia. La paciente está estable y ya recibió el alta médica", dijo la especialista.
La madre de los trillizos agradeció a todo el personal del IMSS que intervino en su atención el día del parto: ginecólogos, enfermeras, camilleros, anestesiólogos, pediatras, trabajadoras sociales, entre otros.
"Estamos muy agradecidos con el Instituto porque a pesar de no ser derechohabiente nos ayudaron, y nos dieron el servicio, estamos muy agradecidos por eso, porque definitivamente no lo podemos pagar, y gracias a Dios todo salió muy bien. La atención fue muy buena, gracias a todas las personas que trabajan en este lugar", mencionó.
Para Yoneida el nacimiento de Iker, Iam y Liam es una bendición, pues, aunque los trillizos fueron prematuros tienen buen peso y gozan de buena salud.
"Me siento muy feliz y orgullosa por mis bebés, y gracias a Dios porque a pesar de tener de 36 semanas nacieron muy bien. Tengo una niña de cinco años, que nació un 10 de mayo, y sin pensarlo me llegaron otros tres regalos por adelantado del Día de las Madres. Quiero felicitar a todas las mamis porque es muy complicado un embarazo desde el principio, pero también es una bendición porque los hijos son una bendición", concluyó.