"Cómo disfrutábamos cada vez que destubábamos a un paciente, era una felicidad pero tampoco esperé que me dieran una puñalada por la espalda y que me pasara todo esto".
A casi dos semanas de que el médico Gerardo Grajales Yuca fuera detenido por elementos de la FGE luego de haber sido denunciado por abuso de autoridad, actualmente se encuentra bajo arraigo dentro de su domicilio en su compañía de su hijo y esposa y un operativo de seguridad custodiando su vivienda.
El médico asegura que es inocente y que pese a que nunca han existido elementos sólidos para acusarlo, las autoridades optaron por encarcelarlo e iniciar este proceso legal sin mostrar la imparcialidad con la que la FGE está obligada a actuar.
(2:46) "Estoy seguro que la injusticia sigue prevaleciendo, que hay personas que deberían estar en eso, yo no le he robado un peso a mi pueblo, son los valores que me sembraron en familia y eso es injusto privarme de mi libertad, aún en mi casa".
Cabe recordar que el médico permaneció en el Centro Penitenciario "El Canelo" siete días, al haber sido detenido el viernes 24 de julio, una semana después, es decir el pasado 31 de julio sufrió la crisis hipertensiva y hasta este martes 4 de julio logró irse a casa con su esposa Fernando Ochoa y su bebé, sin embargo, el proceso en su contra continúa.