Defensores de animales ante las altas temperaturas piden a la población no olvidarse de perros y gatos en condición de calle.
Con la finalidad de disminuir las posibilidades de que algún animal de la calle muera por deshidratación exhortan a la ciudadanía a sensibilizarse y brindar en pequeños depósitos un poco de agua para estos animales.
Con estos calores los perros pueden llegar a presentar golpe de calor.
Un golpe de calor en un perro aumenta su temperatura corporal a más de 42°grados centigrados, teniendo en cuenta que el nivel medio óptimo en perros es de 38 a 39°.
Lo anterior puede manifestarse mediante la presencia de temblores, debilidad muscular y falta de equilibrio.
"Normalmente empieza la fatiga, empiezan a jadear a no estar tranquilos en el lugar adecuado."