Luego de 16 años en la cárcel Juan Pérez Álvarez, indígena tzeltal del municipio de Amatenango del Valle e integrante de la organización Viniketik en resistencia, fue liberado.
Luego de mantenerse en huelga de hambre en el penal de Comitán durante 60 días, Juan, que había sido detenido sin una orden de aprehensión en el 2003, pisoteando sus derechos humanos y había sido obligado a confesar su culpabilidad bajo tortura por el delito de secuestro, por fin se encuentra libre luego de que las autoridades revisaran su expediente y no encontraran elementos que lo inculparan, todo esto a petición de diversos organismos defensores de los derechos humanos, quienes exigen también la revisión de cinco expedientes más que podrían encontrarse en esta misma situación.