A cuatro meses de haber iniciado una huelga de hambre, familias de cinco presos encarcelados en diferentes centros de reinserción social del estado, realizaron un ayuno frente a Palacio de Gobierno, para pedir al gobernador la pronta atención a los manifestantes, toda vez que su estado de salud se ha deteriorado en los últimos días.
Cabe recordar que desde el pasado mes de marzo más de una decena de presos iniciaron con dicha huelga, sin embargo, hasta la fecha sólo permanecen cinco, quienes denuncian presuntas anomalías y fallas al debido proceso y por el cual han permanecido durante años encarcelados.