Tanto el puma y dos coyotes, que fueron rescatados del santuario Black Jaguar-White Tiger y que se enviaron a las instalaciones del Zoológico Miguel Álvarez del Toro, podrían pasar a las áreas de exhibición del ZooMAT, toda vez que las especies gozan de buena salud, pero, además, éstos se encuentran acostumbrados a la presencia humana, por lo que llevarlos a la vida silvestre sería muy complicado.
Tanto el puma como el coyote fueron traídos a Chiapas, debido a que éste es su hábitat, lo que ha ocasionado que se hayan adaptado de buena forma al espacio local y se espera que continúen de esa manera mientras termina la cuarentena, la cual concluye este mes de agosto.
Por lo anterior, se prevé que, para la primera semana de septiembre, el siguiente paso sea obtener muestras de sangre y orina, para posteriormente definir lo que se hará con los ejemplares.
"No solamente es la exhibición, pueden estar en donde no haya exhibición con las características adecuadas de su reciento para que esté agradable, pero esté en programa de reproducción, no siempre pueden estarlo porque eso los somete a un estado de tensión extrema".