Rafael García, pese a la pérdida de su esposa hace más de 20 años -víctima de cáncer-, sacó adelante a sus cinco hijos, quienes hoy en día ya son mayores de edad y tienen una carrera profesional.
"Yo me quedé son mis hijos pequeños? yo le eché ganas, qué me quedaba? ya se casaron, ya soy hasta abuelo".
Y aunque fueron años complicados, la unión familiar, el apoyo de su familia y el deseo de criar a cuatro hombres y una mujer, hizo que Rafael trabajara sin descanso para llevar el alimento, vestimenta, educación y, sobre todo, el amor a sus hijos.
"Perder a la esposa es bastante fuerte para uno pues, la esposa es el timón del barco, es la persona de confianza? primero son los hijos hay que sacarlos adelante".
Hoy, Rafael García vive con su madre, una adulta mayor que requiere de sus cuidados, mientras que sus cuatro hijos y una hija trabajan y viven en diferentes ciudades, sin embargo, cada año para festejar la Navidad se reúnen, pero cada vez, se suman más integrantes a su familia.
"A la vida hay que tomarla bien, porque si lo tomas de frente con todos los problemas, te da azúcar, hay que tomarlo bien, enfrentar lo bueno y lo malo, no toda la vida va a ser buena".