El activista defensor de derechos humanos de migrantes, Luis García Villagrán, ha sido víctima de constantes ataques, el más reciente fue en 2022. Denuncia que los propios grupos armados que lo han amenazado le rebelaron que son las mismas autoridades de migración las que ofrecen sumas millonarias a cambio de su vida.
Desde el asesinato del padre Marcelo Pérez Pérez, cometido el 20 de octubre; ha considerado la posibilidad de solicitar asilo político en otro país, por temor a estas amenazas de las que ha sido objeto, ha puesto en venta sus bienes, ante la falta de garantías que ofrece el mecanismo de protección, de la Secretaría de Gobernación, con el que contaba el padre tsotsil y fue acribillado.
Aún con estas amenazas, sigue en su actividad de acompañamiento a migrantes que actualmente caminan por la carretera costera desde Huixtla, hasta Tapanatepec, Oaxaca, unas diez mil personas en diferentes grupos. Esto, ante las deportaciones masivas programadas por el gobierno del presidente Joe Biden.
"Sufrimos un atentado de parte de un comando de la delincuencia organizada.Hay un contrato de muerte, en mi contra, migración dio tres millones de pesos por tu cabeza y no vamos a devolver el dinero".