Chiapas, ha permanecido por un año en semáforo epidémico en color verde, pudiéndose así realizar todas las actividades, pero con ciertas restricciones.
Aunque desde el primer repunte de casos, los eventos culturales y religiosos en algunos municipios en la entidad se llevaban a cabo, éstos eran sin autorización de las mismas autoridades, no obstante, a casi dos años del primer caso de COVID-19 en Chiapas, eventos masivos de música han comenzado a ser más frecuentes, el más reciente, durante este fin de semana en San Cristóbal de Las Casas y en próximos meses, uno más de rock en Tuxtla Gutiérrez.
Al respecto, médicos advierten a población que los contagios aún son altos, por ello, recomiendan evitar este tipo de reuniones.
"Hay casos que no van a tener registro alguno y nos enteramos que la población sigue teniendo una alta incidencia en ellos, la gente no debe aperturarse en eventos masivos porque el riesgo todavía se puede considerar extremoso".