La elaboración de la rosca de reyes perdura entre familias que buscan preservar esta tradición.
En Terán, doña Victoria Domínguez Solís, prepara la rosca de reyes desde hace más de 30 años y esta costumbre la heredaron sus hijas y sus nietas.
Este año no fue la excepción, prepararon 60 roscas artesanales para su venta. Con un único precio: 230 pesos por cada pieza que es elaborada en horno de barro, mismo que le da un sabor excepcional.
Por horas, doña Victoria dedica su esfuerzo, acompañada de sus decendientes, unas colocan los seis niñitos al interior de cada rosca, otra más coloca las frutas y las demás envinan cada pieza, para luego empaquetarla y quedar lista para su venta.