Una semana ha transcurrido desde que en Chiapas dio inicio el semáforo epidemiológico en color naranja y en las calles la presencia de la ciudadanía es cada vez mayor, los negocios de todos los giros han vuelto a abrir, pero la sana distancia no se lleva a cabo.
En el norte oriente de la capital, específicamente en la colonia Jardines de Grijalva un tianguis en la vía pública fue instalado, mientras que la población acude a realizar sus compras y algunos sin portar su cubrebocas, mientras que al transitar en el centro de la ciudad, el mismo fenómeno se repite, incluso se aprecia a padres y madres con sus hijos sin ninguna protección, además de que aunque se permiten la mayoría de las actividades, se ha hecho énfasis a que los niños no deben acudir a espacios como éstos.
Otros más, que aún tratan de guardar la distancia, temen que surja un rebrote ante la falta de responsabilidad de algunas personas.