En el Hospital de San Carlos, asentado en el municipio de Altamirano, la tradición ancestral del trueque aún prevalece, esto se pone de manifiesto cuando de adquirir medicamentos se trata, ya que contrario a la atención, estos no son gratuitos; frutas, maíz y café son las monedas de cambio habitual para que los pacientes obtengan los medicamentos recetados lo que garantiza a los enfermos acceso a la atención integral. Cabe señalar que este hospital opera con recursos propios, aspecto que se dificulta cuando se han llegado a atender hasta 150 pacientes diarios, sin que el Gobierno del Estado, ayude a este nosocomio.