Monseñor Fabio Martínez Castilla, arzobispo de la Diócesis de Tuxtla Gutiérrez informó que, el pasado 06 de noviembre del 2021, el papa Francisco ordenó la dimisión del estado clerical y la dispensa del celibato, es decir, la expulsión del sacerdote Salvador Valadez Fuentes.
El pasado 12 de enero, Salvador Valadez recibió un documento enviado desde Roma con el que le notificaron que fue expulsado del sacerdocio por haber cometido actos de abusos de poder, de autoridad, manipulación de la conciencia y abusos sexuales en contra de sus mismas religiosas, de mujeres laicas y de menores en Chiapas.
"Reafirmamos nuestro compromiso con las víctimas y quienes se han visto afectadas en su persona, e integridad moral. Como obispo, estoy dispuesto a escuchar y de buscar juntos los caminos de sanación y de misericordia".
Se informó que se inició una investigación canónica, y que tuvo su origen por una denuncia presentada en Estados Unidos en la Diócesis donde sus religiosas están realizando apostolado desde 2018. La Diócesis notificó a la Santa Sede y ésta ordenó iniciar una investigación al entonces sacerdote en su Diócesis de pertenencia en el estado de Chiapas.
En la Arquidiócesis de Tuxtla surgieron otras denuncias de hechos ocurridos en Colombia y se unieron otras denuncias de abusos ocurridos en el Convento El Buen Pastor y en Ixtapa donde fue párroco algunos años.
En el año 2021, Martínez Castilla le ordenó recluirse en un monasterio de Veracruz y le prohibió el ejercicio público del ministerio sacerdotal, hasta que la Congregación del Clero concluyera la investigación desde Roma.
Los hechos que se estudiaron fueron de abusos cometidos desde el inicio de los años 90 cuando apenas comenzaba la fundación del convento de las religiosas y se siguieron a lo largo del ministerio ejercido hasta la época actual.